Asado a precio gourmet: ¿el pollo será el nuevo asado de los argentinos?

Los precios de la carne volvieron a dar un salto en las últimas semanas, con aumentos entre el 10% y el 12%, dejando a muchos consumidores buscando alternativas más económicas. Después de meses con precios congelados, las carnicerías reflejan una tendencia que ya golpea el bolsillo: menos carne en la parrilla y más pollo en la mesa.

En diálogo con comerciantes locales, se destaca que las ventas de carne han caído drásticamente, en algunos casos entre un 30% y 40%. «El que antes llevaba un kilo ahora lleva la mitad. Muchos se volcaron al pollo, y el cordero bajó a 10.000 pesos el kilo», comentó un carnicero.

Pero el golpe al bolsillo no termina ahí: «El asado llegó a 12.700 pesos, el vacío está en 14.900 y todo de primera calidad», indicó otro comerciante, quien detalló que los aumentos son constantes, llegando incluso a registrar subas dos veces por semana.

Los cortes más vendidos están cambiando. Aunque la pulpa, sin hueso, sigue siendo popular pese a su precio elevado, cortes como osobuco y falda han perdido terreno, quizás porque son más típicos del invierno que del verano. Y mientras tanto, el pollo sigue ganando protagonismo, aunque también ajusta sus precios: «Esta semana subió entre un 3% y 4%, pero es lo que más se vende. Aunque la gente ya se está cansando de comer siempre lo mismo», confesó un comerciante.

¿Estamos ante un cambio en la cultura del asado? Con precios que parecen competir con menús de restaurantes de lujo, quizá pronto las reuniones familiares incluyan más pollo que carne en la parrilla. Una señal más de cómo la inflación sigue rediseñando las costumbres argentinas.